Un encargo de arquitectura hostil, para evitar usos no deseados en el frente del edificio, se resuelve atrayendo nuevos usos colectivos que propicien la permanencia temporal de estudiantes y transeúntes. A partir de un estudio ergonómico se define una grilla de pavimento de 40x40cms que se extruye a distintas alturas, conformando un gran mobiliario urbano. Un módulo base se repite, desplaza y adapta para generar escaleras, asientos y mesas cuyas múltiples configuraciones generan diversos espacios nuevos de estar que activan el espacio público.